miércoles, 25 de noviembre de 2015

Brujas y demonios en Asturias



LAS BRUJAS DE PEÑAMELLERA…
 La Bruxa es el nombre de la bruja asturiana. Existen bruxas adivinadoras que curan a las personas con sus ungüentos y capacidades mágicas, e incluso otras más malignas, capaces de transformarse en gatos o cabritos negros, secuestran niños para sus pociones e incluso capaces de volar.
 Cuenta una de las leyendas sobre Pemellera que una mujer de nombre Carla averiguó la manera en que su tía, una magnifica bruja, acudía a los lugares secretos de los aquelarres que se celebraban sobre todo en los cambios estacionales. El ritual que descubrió Carla espiando a su familiar consistía en frotar un extraño ungüento por su cuerpo desnudo, el cual tras pronunciar unas palabras mágicas, le haría capaz de volar sobre una escoba. El etnógrafico Alberto Álvarez Peña recoge las palabras mágicas con exactitud rescatadas de los vecinos más veteranos: “Por enriba de peñas y por debajo de matos a Peñamellera con todos los diablos”. Carla se confundió de palabras y acabó subiendo arrastrada por debajo de rocas y arbustos, terminando con todo el cuerpo herido. Posteriormente acudió a confesarse ante un cura, que no guardó como corresponde el secreto profesional, dilatando así la leyenda generación tras generación. También Peña hacía hincapié en la tradición asturiana de viejas que ocultaban en sus cocinas ungüentos mágicos que otorgan la capacidad para transportarse por los aires en dirección al aquelarre.
 LOS AQUELARRES MÁGICOS
 Las reuniones impías en torno a la hoguera en Asturias coinciden en sus características, dentro de la tradición oral, al del resto de lugares de Europa, siendo muy similares a las descritas y reflejadas a través de los antiguos procesos inquisitoriales. Las brujas y brujos de distintos lugares acudían a estas reuniones malignas durante las madrugadas de los lunes (por culto a la Luna y a la diosa Hécate) y también en las noches de los viernes a sábado (Sabbath) o en fechas importantes, como los cambios estacionales. Las brujas bailaban alrededor de una hoguera con sus cuerpos desnudos, devoraban cadáveres humanos y bebían sangre, sobre todo de niños robados. A la reunión acudía invocado el demonio con cabeza de macho cabrío y de pelaje negro, que caminaba a dos patas, pero con forma también de hombre, con dos prominentes cuernos y un tercero en su frente, del que emergía una luz y también fuego. Todas las brujas le besaban el ano y practicaban actos sexuales unos con otros. En estos actos también realizaban sortilegios, ritos iniciáticos para los más novatos, preparaban terribles maldiciones, sufrían transformaciones y les eran desvelados los mayores secretos del infierno. Bailaban agarrados de la mano de espaldas al fuego. Algunos aquelarres fueron, seguramente más inocentes, tratándose de jóvenes que realizaban su propio culto a la naturaleza o a la fertilidad a escondidas de los demás. En todas las reuniones de Asturias encontramos la costumbre de la Hoguera de la noche de San Xuan, donde se baila alrededor de la hoguera. Es un acto cristianizado pero que en origen es una antigua celebración pagana donde se celebraba la llegada del verano

. LA CUEVA DE LAS BRUJAS, 
LAS RUINAS DE PLECÍN Y OTROS LUGARES MÁGICOS.. 

Los dos concejos de Peñamellera son mágicos y se respira el ambiente centenario de las reuniones paganas y mágicas. Comenzamos con la visión del imponente Pico de Peñamellera. El gran punto de referencia para las brujas que sobrevolaban los aires y que provenían de cercanas y lejanas tierras. Existe como ejemplo en Peñamellera Alta, la Cueva de las Brujas o de Coimbre, que posee interesantes pinturas de animales datadas del inferior y superior Magdaleniense, donde destaca un enorme bisonte que supera el metro de longitud. El Gobierno del Principado de Asturias, trabaja notablemente para que pueda ser visitada en un futuro cercano. Encontramos numerosos monumentos arquitectónicos dignos de visitarse, algunos como las ruinas consolidadas de la abadía de San pedro de Plecín, en Alles. Su origen es precristiano y su posterior advocación fue a San Salvador hasta pasar a San Pedro en el siglo XVI, las ruinas actuales datan de finales del siglo XII o XIII. El impulsor de la construcción fue el conde de Vela, del que se hace constar que fue aquí enterrado. Existen más enterramientos que aparecen en referencia documentales, testificando que en el siglo XVIII existía un sepulcro de un guerrero, cuya lápida poseía interesantes grabados de una espada y dos escudos, seguramente de esta rama descendería el notable linaje de estas zonas, los MIER y que también posteriormente poseyeron aquí una capilla funeraria familiar, todo inexistente en la actualidad. Entre los dos concejos se extienden numerosas construcciones civiles de gran valor arquitectónico, dignas de ser apreciadas durante un enriquecedor paseo por sus pueblos. Un ejemplo sería el palacio de las Helgueras, del que cuentan los más ancianos de Alles que poseía túneles secretos que comunicaban con la casa palaciega de los de Mier en cuyo escudo apreciamos el símbolo de la Orden militar de Santiago

 ¿Sabías?
 Dentro de la tradición oral y mitológica, en los cementerios de Peñamellera Baja se encontraban cuélebres, serpientes de gran tamaño que se alimentaban de la carroña. Los brujos y brujas se alimentaban de la sangre de estos monstruos. En Albadames existía una encina protegida que data del año 400 antes de Jesucristo. Esta clase de árboles eran los favoritos para los aquelarres…


 Cómo llegar? Desde Cangas de Onís seguimos la carretera comarcal AS-114 hasta Las Arenas , tomando la AS-345.Una buena opción sería el viaje sin alturas por la carretera de la costa A-8 desde Llanes, atravesando también Colombres para llegar hasta Unquera para coger la Nacional 621 hasta Panes, capital de Peñamellera Baja. Prosiguiendo desde aquí por la carretera comarcal AS-114recorreemos los dos concejos y llegamos hasta Alles…. 

Fuente " Lugares mágicos  de Asturias